martes, 3 de agosto de 2010

MI OPINION | Hechos son amores y no buenas razones

Ya hay confirmación oficial de que la reforma laboral propuesta por el Gobierno y aprobada por las Cortes responde más a las demandas de los empresarios que a las de los trabajadores. El ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, ha dicho en una entrevista a TV3 que "esta reforma permite llevar a la empresa lo que los empresarios necesitan". Blanco y en botella. Por otro lado, los diputados de la corriente Izquierda Socialista del PSOE, Pérez Tapias y Barrio de Penagos, admiten que la reforma laboral era necesaria pero, quizá, no en los términos en que ha resultado, y advierten de la razón que tienen los sindicatos al afirmar que la reforma laboral abarata el despido y lo facilita. Además, temen que la reforma provoque lo que ellos llaman "despidos preventivos". Sin embargo, ambos diputados votaron a favor de dicha reforma, por lo que sus preocupaciones ─que se agradecen no obstante─ sobran a todos esos trabajadores que se sienten traicionados por un partido político que dice ser socialista y obrero. Éstos, sin duda, agradecen mucho más y aplauden el gesto del diputado socialista Antonio Gutiérrez, que con su abstención no solo fue coherente sino que lo demostró, algo inusual en estos tiempos de travestismo político donde faltan gestos y sobran palabras.


© Francí Xavier Muñoz, 2010
A diestra y siniestra
Cartas al Director y un grito desesperado. Vol. III

No hay comentarios:

Publicar un comentario