jueves, 18 de noviembre de 2010

MI OPINION | Opiniones inexpertas

La ministra de Cultura, González-Sinde, no tuvo un día afortunado cuando dijo que los que no somos expertos en el conflicto Sáhara-Marruecos no opináramos sobre el mismo para no contribuir a la confusión. Se refería la ministra especialmente a los actores que se manifestaron en Madrid, junto a una multitud de ciudadanos. La ministra tuvo la contundente respuesta de los aludidos y la previsible campaña informativa contra sus declaraciones. Y es que la ministra tuvo un desliz rayano en la coacción a la libertad de opinión y expresión que garantiza la Constitución como derechos fundamentales a todos los españoles, expertos o no en cualquier materia. Si aplicáramos su recomendación, echaríamos abajo el principio fundamental de la democracia, y con él, la democracia misma. Lamentablemente, algunos de los errores más funestos de algunos países democráticos son consecuencia, precisamente, de esos expertos que sólo hablan y no escuchan. La ministra no tuvo en cuenta que muchos de esos actores y ciudadanos que se manifestaron en Madrid llevan muchos años colaborando con el pueblo saharaui y, por tanto, sí tienen experiencia en la materia, aunque sea la experiencia que no tienen en cuenta esos expertos que llevan 35 años sin solucionar el problema, y cobrando por ello.

© Francí Xavier Muñoz, 2010
A diestra y siniestra
Cartas al Director y un grito desesperado. Vol. III

No hay comentarios:

Publicar un comentario