El líder de la sección sindical minera de UGT, Fernández Villa, ha dicho que el presidente del Gobierno sería acogido en el acto sindical de Rodiezmo con cariño, afecto y respeto. La secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, ha dicho que se sentiría cómoda en ese acto. El diputado Alfonso Guerra ha sido invitado a Rodiezmo y ha dicho que él va adonde se le invita. Tanto el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, como el presidente del Gobierno, están afiliados a la UGT. El secretario general de este sindicato, Cándido Méndez, está afiliado al PSOE. Unos aprueban por decreto una de las reformas laborales más lesivas para los derechos de los trabajadores que se hayan aprobado nunca, otros avalan con su voto en el Congreso o en el Senado dicha reforma, y otros convocan una huelga general por la reforma laboral decretada y aprobada por sus compañeros de sindicato o de partido en su papel de ministros y diputados. Pero todos ellos se muestran encantados de conocerse a sí mismos en esa doble militancia PSOE-UGT que, por segunda vez en la historia de nuestra reciente democracia, provoca un distanciamiento rotundo de los principios de unos y otros. Sin embargo, no hay ruptura de carnets. ¿Qué nombre tiene esta incoherencia en política?
© Francí Xavier Muñoz, 2010
A diestra y siniestra
Cartas al Director y un grito desesperado. Vol. III
Esta noche a las 10 estará el ministro Corbacho en Punto Radio, donde respondera a la pregunta que lleva haciendole Pepe Sastre desde hace muchos meses, "¿que ha hecho usted hoy para solucionar el paro? a ver lo que contesta el ministro. Un saludo
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